Tapa blanda: 138
páginas
Edición: Candaya
ISBN: 978-8415934561
Precio: 14,25 €
Puntuación: 8/10
En primer lugar agradecer a Masa Crítica, Babelio y a la Editorial Candaya el envío del ejemplar, que me ha permitido disfrutar de un libro de relatos maravilloso.
Tras la lectura de este libro tengo que decir que ha superado ampliamente mis expectativas, porque aunque no he querido indigar sobre él antes de su lectura para no tener prejuicios, por la portada y el título creí que me iba a gustar menos de lo que lo ha hecho.
El libro consta de quince relatos de extensión variable, desde una sola cara a unas treinta páginas los más extensos. El tema de que tratan es variado, desde unas vacaciones gastronómicas a la celebración de una fiesta de cumpleaños con final inesperado, pero todos ellos tienen en común una ambientación asfixiante y cargada de tensión. Porque cuando lees estos relatos se te queda la sensación de que hay algo malo que va a ocurrir, en algunas ocasiones llega a materializarse y en otras tan sólo se vislumbra.
"Dolor habrá siempre y también violencia. La civilización lo volvía todo aséptico y nos evitaba la penosa imagen de nuestra naturales cruel. A la larga, tras tantos años de cultura culinaria, todo se resumía en un grupo de hombres comiendo juntos frente al fuego."
Por eso no todo el mundo es fanático de los relatos, y es comprensible, ya que a veces te dejan con ganas de más. Y aunque yo suelo disfrutar mucho de ellos, he de reconocer que me habría gustado en este caso saber más de cómo continuaría la historia en alguno de ellos. Porque la autora, a veces, sólo muestra lo necesario para crear la tensión narrativa y deja a la
imaginación del lector, que en mi caso suele ser bastante retorcida 😅, la resolución de los mismos.
"Evitaba mirarme en los espejos de madrugada porque siempre me veía horrible, como una versión centenaria de mí misma, pero esa vez alcé la mirada y me topé por accidente con mi reflejo devuelto por uno de los vidrios del gigantesco salón. Estaba espantosa. Nadie podría sospechar que alguien me amara."
Para mí los mejores relatos de este libro son Paladar, La historia incómoda que nos contó Olivia el día de su cumpleaños, Un hombre en mi cama, El Atanudos y La primera vez que vi un fantasma. Son muy originales y consiguen captar tu atención de tal manera que no puedes parar de leer hasta terminarlos. De hecho, yo me leí el libro entero en una tarde porque no podía parar.
Solange Rodríguez Pappe se ha demostrado, con esta serie de relatos, una maestra a la hora de crear historias con tintes terroríficos, fantásticos y sobrenaturales sin necesidad de muchas páginas.
Un libro que gustará a los amantes de los libros de relatos y que es apto para los lectores que huyen de los libros de terror porque realmente no dan mucho miedo.
"-¿Es cierto que en este hotel hay un fantasma?
-Claro, todos los hoteles tienen fantasmas, ¿qué creías?."
SOLANGE RODRÍGUEZ PAPPE
Catedrática y escritora ecuatoriana de narrativa breve.